Cuatro generaciones rugiendo a la vez.
Cada una de las cuatro generaciones del SEAT León se ha avanzado a su tiempo, manteniendo a la vez un mismo ADN a lo largo de sus más de 20 años de historia. Diseñadas, desarrolladas y creadas en Barcelona, todas ellas comparten una misma esencia que ha convertido al León en un pilar de la marca y, con más de 2 millones de unidades vendidas hasta el momento, en una leyenda que sigue agrandándose. “Es el modelo que ha puesto a SEAT en el mapa mundial del automovilismo, por su diseño, su tecnología y su calidad”, asegura Isidre López, responsable de Coches Históricos de SEAT.
1ª generación (1999), pisando fuerte.
Diseñado por Giorgetto Giugiaro, el primer León supone la entrada de SEAT en el segmento de los compactos. “El primer León ya marca tendencia con un diseño con mucha personalidad”, mantiene López. “Fue una gran puesta al día en tecnología y calidad”, asegura José Miguel Royo, responsable de proyecto en Desarrollo de Carrocerías de SEAT. Fue pionero en muchos ámbitos: el primer coche de la marca producido simultáneamente en dos fábricas (Bruselas y Martorell), que tuvo tracción a las cuatro ruedas y cambio de seis velocidades, además de ser también el primero en superar los 150 CV de potencia, con 180. “Era un modelo superior a lo que hasta entonces teníamos, por su carrocería totalmente cincada (para protegerla de la corrosión y mejorar su aspecto) y también por extras como la apertura automática de la boca-carga de la gasolina, muy sofisticada en ese momento”, añade Michael Geue, responsable de Desarrollo de Estructura y Anticorrosión en SEAT.